Obesidad: “Cada vez más gente viene a vernos para estar más sana”, dice un médico del Hospital del Norte de Marsella

Casi uno de cada dos franceses padece sobrepeso u obesidad, según una encuesta de la Liga contra la Obesidad. En Francia hay 37 centros especializados que ofrecen tratamiento, uno de ellos en Marsella.

En la actualidad, ocho millones de personas son obesas en Francia, según una encuesta realizada por la Liga contra la Obesidad, basada en cerca de 10.000 adultos. Esta proporción se ha duplicado en sólo 25 años. Para frenar esta progresión, el Hospital del Norte de Marsella trata a 300 personas cada año.

Stéphanie padece obesidad desde hace varios años y ya ha probado de todo para adelgazar. Funciona durante un tiempo, pierdes mucho y luego te vienes abajo y lo recuperas todo. Esta marsellesa de 43 años lleva varios meses controlada por un equipo de profesionales.

Ponerse al día con los efectos del confinamiento
Es un enfoque multidisciplinar a nivel médico: seguimiento dietético, actividad física adaptada y un psicólogo”, explica Véronique Germain, dietista. Hay todo un proceso de atención antes de tomar la decisión de operarse.

En este centro especializado, la capacidad es limitada y la demanda aumenta constantemente, sobre todo entre los jóvenes adultos de 18 a 21 años, cada vez más numerosos desde los devastadores efectos del encierro. Tenemos muchos pacientes que eran adolescentes en el momento del encierro”, advierte Pauline Duconseil, cirujana digestiva.

La hipertensión, la diabetes y la apnea del sueño están asociadas a la obesidad. Se desarrollan muchas enfermedades, recuerda Thierry Bege, cirujano visceral. “A menudo venía gente a vernos para adelgazar. Ahora cada vez viene más gente para estar más sana”.

Un tratamiento en fase de prueba
Estos profesionales pueden contar con nuevos fármacos que aparecieron un poco por casualidad. Al principio, se trataba de inyecciones antidiabéticas que resultaron ser auténticos supresores del apetito. Permiten una pérdida de peso de más del 10%, lo que es muy significativo”, afirma Thierry Bege. Pero la realidad es que también hay personas que no pierden peso con estos fármacos. También sabemos que cuando se dejan de tomar, el peso vuelve a su nivel anterior.

Por el momento, estos fármacos están reservados a los casos más graves de obesidad, y sólo se recetan en algunos centros especializados. Todo ello despierta el interés y el recelo de las autoridades y los médicos, que esperan evitar abusos.